Carta - Páscoa 2024
Santa Páscoa 2024 “Nosso Redentor ressuscitou dos mortos: cantemos hinos ao Senhor nosso Deus, Aleluia”   (Da liturgia) Queridos irmãos, com a chegada da Santa Páscoa, gostaria de chegar idealmente a cada um de... Czytaj więcej
Carta - Páscoa 2024
Santa Páscoa 2024 “Nosso Redentor ressuscitou dos mortos: cantemos hinos ao Senhor nosso Deus, Aleluia”   (Da liturgia) Queridos irmãos, com a chegada da Santa Páscoa, gostaria de chegar idealmente a cada um de... Czytaj więcej
prev
next

Santuários mais visitados

Items filtered by date: agosto 2017

Queridos amigos Leigos saletinos,
Há alguns anos o dia 10 de Setembro tem sido uma data muito importante para vocês, pois se celebra a jornada Mundial dos Leigos saletinos, solicitada oficialmente pela primeira reunião dos Leigos Saletinos, que teve lugar em La Salette (Setembro de 2011), aceite e ratificada por uma decisão do Capítulo Geral de 2012 .
A celebração pede a vós e a nós Missionários para não esquecermos os princípios que são a base deste movimento da Igreja, inspirado na mensagem de reconciliação da Bela Senhora de La Salette:
1) Dedicar-se concretamente para que haja cada vez mais a coerência entre a fé e a vida vivida, bem como o equilíbrio entre a oração e trabalho diário.
2) Viver e testemunhar com alegria a nossa pertença a Cristo e à Sua Igreja
3) Conhecer, aprofundar e fazer sua a mensagem de Nossa Senhora de La Salette
4) Tornar-se mulheres e homens construtores de pontes e trabalhando para um mundo reconciliado a todos os níveis (famíliar, laboral, profissional ....)
5) Partilhar alegrias, sofrimentos e desafios da missão evangelizadora dos Missionários de La Salette
6) Pedir ao Senhor para que suscite vocações sacerdotais e religiosas na sua Igreja e na nossa Congregação.
Setembro é um mês muito especial para todos nós, porque no dia 19 nos lembramos e celebramos o aniversário da aparição de Maria em La Salette. Para nós Missionários e para vocês Leigos saletinos tudo começou neste dia, aos pés da virgem em lágrimas ...
Onde quer que estejais no mundo, eu desejo que cada um de vocês se torne membro mais ativo e zeloso da nossa grande "família carismática saletina", seguindo o exemplo dos dois pastorinhos Maximino e Melânia que, uma vez impressionados pelas palavras e lágrimas da Bela Senhora, nunca hesitaram em testemunho públicamente a profunda experiência humana e espiritual que tinham vivido na montanha de la Salette aos 19 de setembro de 1846.
Desejo-vos boa Festa de Família, com a promessa de rezar especialmente por vós!

Atenciosamente,
vosso

Pe. Silvano Marisa, MS
Superior Geral

LaiciSalettini2017

Published in INFO (PT)

Sabiduría, Sumisión, Lágrimas
Vigésimo primer Domingo del Tiempo Ordinario: Isaías 22:19-23; Romanos 11:33-39; Mateo 16:13-10
Las lecturas son a cerca de la autoridad. Un cierto Sobná es reemplazado por Eliacín como jefe del palacio; Simón es establecido como piedra angular de la Iglesia, con el poder de soltar y de atar; y los juicios de Dios no requieren del consejo de nadie.

Desde otra perspectiva, sin embargo, las lecturas tratan menos de autoridad que de la libertad de elegir que tiene Dios. Por qué Dios eligió a Sobná o a Simón, no se explica, pero la Sabiduría y el conocimiento de Dios son profundos y valiosos, y Él sabe lo que está haciendo y porque lo hace. Esto puede ser difícil de captar, especialmente en momentos de tragedia pública o privada. El dicho “es la voluntad de Dios” no siempre puede ser percibido como una explicación satisfactoria. Aun Job y Jeremías parecían esperar que Dios les justifique su modo de tratarlos.

Por lo tanto, no debería sorprendernos, que los agricultores de los alrededores de La Salette se hayan burlado de Dios cuando sus cosechas se arruinaban. Su vida era dura en el mejor de los casos, y para ellos las normas a cerca del descanso y la alabanza dominicales no eran otra cosa que “cuento de viejas”, interesante solamente para unas “cuantas mujeres ancianas que van a Misa” – para usar las palabras de la Bella Señora.

María no siente la necesidad de defender a Dios. Muy por el contrario, nos invita a someternos. La sumisión que ella tiene en vista no es pura pasividad. Es un reconocimiento activo de quien es Dios y quienes somos nosotros, del omnipotente conocimiento de Dios y de su infinita sabiduría.
Este tema no es nuevo con La Salette. Los escritores espirituales por mucho tiempo han usado el lenguaje del “abandono” y del “entregarse” a la voluntad de Dios. Lo que resalta en La Salette es lo que pasa cuando el Pueblo de Dios no reconoce su voluntad, no la acepta ni se somete a ella.

Los desastres naturales, por ejemplo, son exactamente eso: naturales, aunque son a menudo llamados de “actos de Dios”. No toda catástrofe es un castigo. Aun así, el sufrimiento y la infelicidad que muchas veces nos rodean pueden hacer que nos preguntemos a cerca del mundo y de nuestro lugar en él.
María proporcionó una detallada lista de problemas apropiados para el lugar donde ella se apareció: las diversas cosechas estaban mal, y los niños pequeños estaban muriendo. Si ella se hubiera aparecido en nuestro país, ¿Qué desastres y tragedias pondrían llanto es sus ojos hoy?
Traducción: Hno. Moisés Rueda, M.S.

Published in MISSAO (POR)

Casa de Oración
(Vigésimo Domingo del tiempo ordinario: Isaías 56:1-7; Romanos 11:13-32; Mateo 15:21-28
Jesús se conmovió por la profunda fe de la mujer cananea y le dijo con admiración: “Mujer, que grande es tu fe”
Ella demostró su fe de dos maneras: la primera, creyendo que Jesús podía curar a su hija, y luego al darse cuenta de que, como una extranjera, realmente no teniendo ningún derecho de pedir su ayuda, se estaba lanzando a su misericordia. Fue esta humildad la que cautivó a Jesús.
Esto es un cumplimiento de la profecía de Isaías: “Mi casa será llamada casa de oración para todos los pueblos” El templo fue originalmente un lugar de oración solamente para los judíos. En Hechos 28:21, San Pablo es acusado erróneamente de traer a un gentil y hacerlo entrar en el templo – una ofensa muy seria. Pero Isaías ya vio de antemano el día cuando el templo estaría de hecho abierto para todos los pueblos. Ese Templo es la Iglesia. El Pueblo de Dios.
La gran mayoría de los cristianos son descendientes de los gentiles. En los Hechos de los Apóstoles leemos que los gentiles se alegraron de que el Evangelio estuviera siendo predicado a ellos. San pablo de nuevo hoy expresa su esperanza de que su propio pueblo judío un día aceptará el don de la fe que él les ofrece, que ellos estarán lo suficientemente celosos de los gentiles como para decir: “yo quiero lo que ellos tienen”
Todo se trata de la misericordia, don gratuito de Dios. Nadie más que Él puede decidir quién se lo merece. Él no está sujeto a ninguna regla. “Yo tendré misericordia de quien yo quiera”. Éxodo 33:11 citado en Romanos 9:15)
La Salette sigue el mismo proceder. No por nada hablamos de la “misericordiosa aparición de María”. En diferentes partes de su mensaje, ella de manera sorprendente parafrasea las palabras de Isaías a cerca de los extranjeros, “amando el Nombre del Señor y haciéndose sus servidores – todos los que observan el sábado sin profanación y mantienen mi alianza, a ellos yo los atraeré a mi santa montaña y habrá motivo de alegría en mi casa de oración.
María apareció en 1846 porque su “casa de oración” había dejado de ser el lugar donde su pueblo encontraba alegría. Muchos peregrinos de La Salette redescubren la misericordia de Dios que los conduce a la fe. Para otros, el redescubrimiento de la fe los lleva a reconocer la misericordia de Dios. Sea como fuera, todos se regocijan al encontrar su lugar en la Casa de Oración de Dios.
Traducción: Hno. Moisés Rueda, M.S.

Published in MISSAO (POR)

Las angustias del corazón
(Décimo noveno Domingo del Tiempo Ordinario: 1 Reyes 19:9-13; Romanos 9:1-5; Mateo 14:22-33)
Antes y después del episodio relatado en la primera lectura – el viento, el terremoto, el fuego y la brisa suave – el Señor le pregunta a Elías, “¿Por qué estás aquí?” y las dos veces Elías responde: “Me consume el celo por el Señor, Dios Todopoderoso, porque los israelitas han abandonado tu alianza.”
San Pablo describe la angustia que está experimentando a causa de propio pueblo. Habiendo experimentado para sí mismo a Jesús como Mesías y Salvador, profundamente deseó compartir su fe con todos los judíos devotos. Es por eso que en sus viajes misioneros fue primeramente a las sinagogas locales para predicar las Buena Nueva, pero con poco éxito.
En La Salette María describe su angustia en estos términos: “Hace tanto tiempo que sufro por ustedes! … pero por mucho que recen, por mucho que hagan, jamás podrán recompensarme por el trabajo que he emprendido a favor de ustedes”
Jesús expresó su decepción por la poca fe de Pedro: Muchos católicos y cristianos hoy están afligidos, no tanto por la poca fe sino por la aparente falta total de fe de tantos. Es reconfortante sabe que San Pablo y la Bella Señora conocieron ese dolor. No estamos solos.
En el Salmo Responsorial encontramos ánimo.
Escucharé al Señor que proclama;
Al Señor que proclama la paz…
La justicia brotará desde la tierra,
Y la justicia mirará desde el cielo.
El mismo Señor nos dará sus bienes
Y nuestra tierra dará sus frutos.
Cuan cercano esto es a la imagen que Nuestra Señora usa a cerca de la cosecha abundante que vendrá, “si se convierten”. Su propósito más profundo es el de plantar las semillas de la paz y la reconciliación, de la verdad y fidelidad, de la justicia, justicia que incluye, pero va más allá de lo requerido en los mandamientos y en las leyes. Si echan raíces y producen fruto, los bienes del Señor vendrán a continuación.
La angustia del corazón no impidió a San Pablo ni a Nuestra Señora llegar cerca de su pueblo. No debemos dejar que nos detenga a nosotros tampoco. Si por alguna razón somos incapaces de llegar de manera directa, podemos hacerlo siempre en la oración.

Published in MISSAO (POR)
Sign in with Google+ Subscribe on YouTube Subscribe to RSS Upload to Flickr

Login >>> ELENCHUS

Go to top